Cae la nieve,
los copitos parecen plumitas blancas
la mañana es
nívea y fría
los árboles
aguantan
como callados fantasmas
un pajarito
arriesgado se arrepiente
la belleza tan
pura duele,
como duele el
alma en el silencio.
Se escuchan los
acordes de una guitarra,
tiembla la voz
en una dulce canción,
un réquiem que
nadie escucha, solo yo
qué lejos está
la primavera..