jueves, 20 de diciembre de 2018

Volar muy lejos.

No necesito un hijo que me quiera,
ni que sea feliz, ni hermoso,
ni que triunfe y me sonría,
ni un hijo que me cuide,
me proteja, me tutele.
Necesito, simplemente,
un hijo que me sobreviva
y al que poder amar hasta el final.
Si me faltara,
¿qué haría yo con tanto amor
como me crece para él
cada mañana?

Begoña Abad  (Burgos -España 1952)


4 comentarios:

  1. Jo, Miry. Tremendo poema que muestra lo que significa ser madre. Es el Amor desinteresado, puro. No imagino mayor infierno en vida que ver morir a un hijo. Un fuerte abrazo!!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola David, sí, me parece tan conmovedor. Me encanta la simpleza de esta poeta. Dice lo que todos sentimos. El amor al hijo por encima de todo. Gracias por leer. Un abrazo.

      Eliminar
  2. Un bello poema dedicado al amor materno incondicional al que solo pondría una pega (a menos que no lo haya captado bien). Si toda madre (y padre) desea lo mejor para su hijo, ¿por qué no desearle, pues, que sea feliz y que triunfe en la vida?
    Un abrazo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hola Josep, creo que ella quiere decir que nada importa tanto como tener al hijo, porque perder a un hijo es que "no tiene nombre". Ella solo quiere amarlo, no le interesa nada más. Será que tengo una amiga que más amiga es mi hermana, tenemos una amistad desde pequeñas, ella perdió a su hija y no hay palabras para explicarlo. Un abrazo.

      Eliminar

¡Gracias por dedicar tu tiempo!